martes, 9 de febrero de 2016

COMENTARIO DE TEXTO


GARCILASO DE LA VEGA



A/ Daf/ne/ ya/ los/ bra/zos/ le/ cre/cí/an,  11A
y en/ luen/gos/ ra/mos/ vuel/tos/ se/ mos/tra/ban;  11B
en/ ver/des/ ho/jas/ vi/ que/ se/ tor/na/ban  11B
los/ ca/be/llos/ que al/ oro os/cu/re/cí/an.  11A

De ás/pe/ra/ cor/te/za/ se/ cu/brí/an  11A
los/ tier/nos/ miem/bros/ que aún/ bu/llen/do es/ta/ban;  11B
los/ blan/cos/ pies/ en/ tie/rra/ se hin/ca/ban,  11B
y en/ tor/ci/das/ ra/í/ces/ se/ vol/ví/an.  11A

A/quel/ que/ fue/ la/ cau/sa/ de/ tal/ da/ño,  11C
a/ fuer/za/ de/ llo/rar/, cre/cer/ ha/cí/a  11D
el/ ár/bol/ que/ con/ lá/gri/mas/ re/ga/ba.  11E

¡Oh/ mi/se/ra/ble es/ta/do, oh/ mal/ ta/ma/ño!  11C
¡Que/ con/ llo/rar/la/ crez/ca/ ca/da/ dí/a  11D
la/ cau/sa y/ la/ ra/zón/ por/que/ llo/ra/ba!  11E


El poema que a continuación vamos a comentar, es el Soneto XIII de Garcilaso de la Vega.
Garcilaso de la Vega (1501-1536), fue un poeta castellano que introdujo el petrarquismo en la literatura castellana. Encarna plenamente al prototipo de hombre del Renacimiento: es un hombre de armas y de letras, aunque tiene conocimiento de un amplio conjunto de temas.

Este soneto hace referencia a un mito de la época griega, el mito de Apolo y Dafne. No olvidemos que ésta es una época donde vuelven a surgir los principios de la cultura antigua, y los mitos griegos y latinos son un tema recurrente.
Según el mito, Apolo y Eros discuten sobre quién es el mejor arquero. Esa discusión los lleva hasta la ofensa del otro, y Eros, toma venganza. Decide flechar a Apolo con las flechas del amor hacia Dafne, ninfa del Bosque. Con ella hace otro tanto, pero en vez de hacerlo con flechas de oro lo hace con las de plomo, que provocan en la víctima el rechazo y desprecio del ser amado. Así Apolo asedia a Dafne, y ella huye de la persecución de Apolo. Cansada de esta persecución, pide ayuda al diosa Gea, que la transforma en laurel, lo cual provoca en Apolo un gran dolor y tristeza.

En cuanto a la estructura externa vemos que este poema es un soneto, es decir, un poema de catorce versos endecasílabos (en este caso, ya que podrían ser alejandrinos), con rima consonante y estructurado en dos cuartetos y dos tercetos. El esquema de la rima de este poema es A-B-B-A en los cuartetos y C-D-E en los tercetos.

Internamente el poema se divide en tres partes: la primera parte abarca los dos cuartetos, en los cuales se nos describe la transformación de Dafne en un árbol. Para ello, Garcilaso emplea muchos epítetos para remarcar aún más esta transformación. La segunda parte incluye el primer terceto, en el cual nos habla del amor y aparece el tema principal, la tristeza por el rechazo de la amada. La tercera y última parte incluye el último terceto, la cual es como una pequeña conclusión, en la que predomina la función emotiva.

Garcilaso se destaca por la búsqueda de la perfección. Entre las características más importantes sobresalen la musicalidad; la cual obtendrá mediante encabalgamientos, versos endecasílabos y una rima consonante, la suavidad y la elegancia.
En cuanto a recursos lingüísticos podemos encontrar metáforas a la vez de hipérboles: "los cabellos que al oro oscurecían", epítetos: "verdes hojas"; "áspera corteza", varios hipérbaton y encabalgamientos.

Cabe destacar que en este soneto aparecen casi todos los tópicos del renacimiento: tópicos mitológicos, el tópico de la mujer del renacimiento o ideal de belleza, el petrarquismo: amor no correspondido, etc. Por ello hay que recalcar la figura de Garcilaso de la Vega como uno de los grandes poetas del renacimiento.

domingo, 15 de noviembre de 2015

COMENTARIO DE TEXTO LITERARIO



Comentario de texto literario

Nos encontramos ante un fragmento de la introducción de Milagros de Nuestra Señora, una obra de Gonzalo de Berceo, esta obra pertenece al meter de clerecía, podemos situarla en la primera mitad del siglo XIII, en la edad media. Esta etapa responde al sistema conocido como feudalismo, en el cual tanto la forma de vida como los derechos y deberes del individuo dependían del grupo social al que pertenecían: nobleza, clero y campesinos. El mundo medieval se hallaba impregnado de religiosidad, Dios era el centro del universo (Teocentrismo) y la vida terrenal solo tenía sentido como camino hacia la vida eterna. La cultura estaba en manos de los clérigos, los únicos que sabían leer y escribir, la lengua de prestigio era el latín aunque se inicia una literatura escrita en lenguas románicas. 


El mester de clerecía se caracteriza por las obras escritas por los clérigos, como Gonzalo de Berceo. Los clérigos conocían los textos latinos, sin embargo no utilizaron el latín, sino que escribieron sus obras en castellano para que pudieran ser entendidas por el pueblo.

Gonzalo de Berceo escribió obras de contenido religioso, como es la obra a la que pertenece este fragmento. Con estas obras además de entretener, pretendía transmitir conocimientos, valores cristianos y normas de conducta. 

Respecto a la estructura externa, podemos observar que Berceo utiliza la estrofa típica del mister de clerecía, la cuaderna vía, un tipo de estrofa que esta compuesta por cuatro versos alejandrinos, con una cesura en la mitad, que riman entre sí de forma constante.


En relación con el tema de este fragmento, el narrador se presenta como un peregrino que llega a un prado verde y magnífico para un hombre cansado, este prado no es un lugar real sino que representa a la Virgen.


En cuanto a la expresión del texto se observa un cuidado y selecto lenguaje (acaecí, soberbio), pero a la vez se aprecia cierta sencillez a la hora de hablar de la naturaleza (prado verde, de flores bien poblado). 


Este fragmento se podría interpretar como una metáfora de la virgen.





A/mi/gos / y / va/sa/llos / de / dios / om/ni/po/ten/te,
14
                Si es/cu/char/me / qui/sie/ra/is / de / gra/do a/ten/ta/men/te
14 a
  Yo / os / que/rí/a / can/tar / un / su/ce/so ex/ce/len/te:
14 a
Al / ca/bo / lo / ve/ré/is / tal / ver/da/de/ra/men/te.
14 a


      Yo, / el / maes/tro / Gon/za/lo / de / Ber/ce/o / lla/ma/do,
14 b
Yen/do/ en / ro/me/rí/a / a/cae/cí/ en / un / pra/do 
14 b
         Ver/de, / y /bien / sen/ci/do, / de / flo/res / bien / po/bla/do, 
14 b
      Lu/gar / a/pe/te/ci/ble / pa/ra el / hom/bre / can/sa/do.
14 b





                   Da/ban/ co/lor/ so/ber/bio /las/ flo/res /bien /o/lien/tes,                           14 c


                        Re/fres/ca/ban /al/ par / las /ca/ras/ y/ las/ men/tes;                            14 c



                   Ma/na/ban/ ca/da/ can/to /fuen/tes /cla/ras/ co/rrien/tes,                        14 c


                      En/ ve/ra/no/ bien/ frí/as, /en/ in/vier/no/ ca/lien/tes.                            14 c





Ignacio Sualdea Negueruela
1ºD


viernes, 22 de mayo de 2015

Más allá del terremoto
(Angustia existencial)


  • ¡ Mamá, Mamá, de mayor quiero ayudar a esos niños de la televisión!.- dije a mi madre después de ver el Telediario, hace hoy 22 años, 2 meses, 33 días y 5 horas.

No deja de retumbar y retumbar en mi cabeza esa frase, fruto de un espíritu altruísta y benefactor en el que siendo aún un niño me encontraba inmerso, ya sea por la inocencia de la niñez o, quizás, por un complejo de superhéroe (inocencia al fin y al cabo).

Aún recuerdo ese mocoso de cabello rubio y ojos negros, feliz pensando que había nacido para salvar este mundo insalvable, este circo tétrico y sin humor, esta vida llena iniquidades…. y que cambiaría el rumbo de esta esfera gigante llamada tierra.

La televisión nos enseñaba la otra cara del mundo, en la que lo que importa no eran las consolas, ni las tablets, ni la ropa de marca, ni las fiestas de cumpleaños…, sino que lo que la gente suplicaba era un mendrugo de pan y un poco de agua potable y, como extra o si fuera posible, medicinas.

Desde ese momento orienté mi vida, mis estudios y mi formación a ayudar a los más necesitados. Estudié medicina y participé en todos mis ratos libres con organizaciones sin ánimo de lucro para luchar contra el hambre y la enfermedad. Pese a que todos me dijeron que estaba loco, salvo mis padres, que siempre me dieron su apoyo incondicional, decidí ir a prestar toda mi ayuda y colaboración, así como mis conocimientos como profesional de la medicina a un poblado nepalí, muy cercano a Katmandú. Los principios fueron increíblemente duros y difíciles: las crisis políticas, la falta de apoyos, la insolidaridad…., pero lejos de tirar la toalla, todos los que estábamos allí de cooperantes con Médicos Sin Fronteras, nos hacíamos cada vez más fuertes y más fuertes y luchábamos contra la adversidad con todo nuestro ímpetu. No había barrera, ni muro, ni montaña que no estuviésemos dispuestos a pasar, derribar y escalar por conseguir superar la injusticia, el hambre, la enfermedad… Dedicamos todos nuestros esfuerzos y nuestra energía a levantar un Hospital y una Escuela, que permitió dar un diminuto giro a aquella noticia del telediario que definió cómo iba a ser mi vida y de qué manera iba a vivirla.

¿Y ahora qué? Aún no ha pasado un mes desde aquel fatídico 25 de abril en el que la tierra tembló en nuestro pequeño paraíso, asolando todo lo que con tanto esfuerzo, amor e ilusión habíamos levantado. Un terremoto que se llevó todo y además, nuestro corazón, nuestra alma y toda una vida dedicada a hacer felices a muchas personas con las cosas más banales y más nimias.

Ahora hay un pensamiento que se revuelve en mi cabeza y es ¿porqué estaba encendida la televisión ese día hace 22 años en mi casa?, ¿fui la única persona a la que se le revolvió algo por dentro al ver aquellas imágenes?, ¿ha servido de algo dedicar todos estos años de mi vida a las ruinas que tengo delante de mí?. Miro mis manos, aquellas manos que hace años construían un Hospital y que estaban impolutas cuando me ponía unos guantes antes de entrar en el quirófano, hoy son unas manos yermas, incapaces de abarcar tanta desproporción, incapaces de hacer nada, absolutamente nada. He vivido de una ilusión, de un convencimiento, de no haber querido ver la realidad de la vida, de confundir el querer con el poder… y sin nadie al lado que me abriera los ojos, que me despertara de ese sueño profundo e hipnótico. Si Dios existe por aquí no ha pasado. Creo que ha llegado el momento de dedicarme a otra lucha, de cerrar los ojos a tanta desolación, de dar la espalda como tantos y tantos, pero ¿seré capaz?. Puede que este no sea el momento de tomar esta decisión o puede que sí. Miro a lo lejos y miro al horizonte y no veo nada, no veo esperanza, veo oscuridad, está todo borroso, ¿qué debo hacer?. Me viene al recuerdo una frase de Karen Blixen, en su libro “Memorias de África”, que para mi hoy cobra un sentido totalmente diferente y especial:

“Denys me había dado una brújula "para seguir el rumbo" dijo, pero mas tarde comprendí que navegábamos con rumbos distintos. Quizás él sabía, aunque yo no, que la tierra fue creada redonda para que no podamos ver el final del camino.”






Nacho Sualdea Negueruela (4ºA)

domingo, 7 de diciembre de 2014

Estimado señor director de El País: soy un gran aficionado al fútbol, que es mi deporte favorito y del que tengo ocasión de disfrutar jugando en mi equipo la liga de Cantabria. Como aficionado a este deporte, es muy fácil poder disfrutar en todos los canales de televisión de los partidos de la jornada nacional e internacional: la champions, la UEFA, la Liga BBVA, etc., y además de esto no solo las dos horas de rigor que duran los partidos, también tengo la ocasión de disfrutar con las previas, los post partidos, los programas especiales de fútbol...; todos y cada uno de los días de la semana. Hasta puedo ver los partidos de mi equipo local, repeticiones de partidos históricos, y hasta algún partido de las ligas regionales. Desde luego que estoy completamente satisfecho del tiempo que dedica la televisión al deporte que mas me gusta: el fútbol.

Sorprendentemente ayer estuve viendo los deportes en el telediario y me he enterado de que en Doha entre los días del 3 al 7 de Diciembre se está celebrando el campeonato del mundo de piscina corta en el cual participa una de las más importantes deportistas de nuestro panorama nacional, Mireia Belmonte. Pude ver la imagen en la que Mireia bate el récord del mundo de 200 metros mariposa, fue impresionante; pero no solo ha sido este el récord del mundo que ha batido, si no que también batió el récord del mundo de 400 metros estilos, a lo que hay que sumar otros dos oros en 800 metros y 400 metros libres. Creo que es injusto el poco tiempo y la poca dedicación que se ha dedicado desde los espacios televisivos a esta hazaña de nuestra nadadora nacional. No creo que haya ningún partido de fútbol en estos días que se haya acercado en importancia a estos récords y a estas medallas conseguidas por Mireia. Que sirva esto para reivindicar la dedicación de espacios televisivos a la importancia del logro deportivo, cosa que se puede hacer extensiva a otros deportes (tenis, baloncesto, etc.).






domingo, 23 de noviembre de 2014

Don Juan Tenorio

Allá lejos en las tenebrosas montañas de Transilvania vivía Don Juan en la penumbra de un castillo. Solo vivía con una obsesión lo que le llevó a secuestar a su amada Doña Inés inocente y desconocedora de la terrorífica vida que rodeaba a Don Juan. En la fría cripta donde Doña Inés estaba retenida Don Juan se dispuso a manifestar su amor rodeándola entre sus brazos y con Doña Inés aterrada la empezó a decir:

Cálmate, y reposa aquí un momento
olvídate de tu triste vida y disfruta conmigo la eternidad.                                                          ¡Ah! ¿No es cierto, ángel de amor, que en esta apartada orilla
más pura la luna brilla
y se respira mejor?
Esta aura que vaga llena
de los sencillos olores
en los oscuros bosques
que brota esa orilla amena;
esa agua limpia y serena
que atraviesa con temor
el castillo del terror
que espera cantando la noche,
Esa armonía que el viento
recoge entre esos imponentes abetos
que agita con manso aliento,
ese terrorífico acento
con que trina el búho
de sus copas morador
llamando a la cercana noche,
¿no es verdad, gacela mía,
que están respirando amor?
Y estas palabras que están filtrando insensiblemente
tu corazón, ya pendiente
de los labios de don Juan,
y cuyas ideas van
inflamando en su interior
un fuego germinador
no encendido todavía,
¿no es verdad, estrella mía,
que están respirando amor?
En ese momento Don Juan hincando sus afilados y blancos colmillos en el pálido cuello de Doña Inés la hace suya para toda la eternidad.

viernes, 3 de octubre de 2014



M

 AUTORRETRATO LINGÜÍSTICO
                   
   Por Ignacio Sualdea Negueruela               


e críe en un entorno donde se hablaba la lengua 
castellana, en Cantabria. Desde pequeño he tenido contacto con una segunda lengua, el inglés. He tenido contacto con esta lengua gracias al colegio, también iba a academias de inglés. Todos los años voy a Almería y me familiarizo con un dialecto distinto al mío, el andaluz; también por mi profesor de lengua. También he ido a Francia pero no tenia conocimientos para hablar el idioma, ni para entenderlo.
He estado en Italia y era capaz de entender algunas oraciones pero en general no entendía el idioma, algunos también hablaban el inglés y podíamos hablar con ellos gracias a la lengua inglesa.

Mi madre nació en Valladolid, cuna del castellano, y lugar de nacimiento de importantes escritores como Miguel de Cervantes. Valladolid también es conocido como pucela, entonces mi madre no es vallisoletana, es pucelana. Sin embargo Valladolid vive una situación de loísmo y leísmo.

Mi padre es de Burgos y siempre me ha resultado curioso su entonación en las preguntas, pues no tiene nada que ver con la entonación que se las da aquí.

Tenemos una cuidadora en casa para mi hermana, ella es peruana con lo cual escucho muchas expresiones curiosas de este país. De pequeños mi hermano y yo hemos tenido cuidadoras de muchos países (Colombia, Senegal…),  aparte de España, que sin embargo nunca han influido en mi forma de hablar pues nunca he llamado a un coche “carro”, a una colchoneta “saltarín”, a un huevo cocido “huevo sancochado”, etc.

Un problema que hay en Santander es el abuso del condicional, el “sería” por “fuese”, o el “gustaría” por “gustase”, etc. Siempre que lo oigo me chirrían los oídos, cometeré otros errores lingüísticos pero este no le cometo.